El informe presentado por la OMS en Madrid refuerza el papel del sistema sanitario español y subraya la importancia de avanzar juntos hacia una atención más humana, cercana y centrada en las supervivientes.
HoyLunes – La presentación del nuevo informe de la OMS desde Madrid vuelve a poner el foco en la necesidad global de fortalecer la respuesta sanitaria frente a la violencia machista. España, reconocida por su implicación en este ámbito, reafirma su compromiso con una agenda de protección centrada en la autonomía, la dignidad y los derechos de mujeres y niñas.
La violencia contra mujeres y niñas ha vuelto a ocupar un lugar central en la agenda internacional tras la publicación del nuevo informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), presentado en las jornadas “¡Yo te creo! Construir sistemas de salud que pongan en el centro a las mujeres y niñas supervivientes”, inauguradas por la ministra de Sanidad, Mónica García, y por el director de la OMS en Europa, Hans Kluge.
El informe —que constituye un análisis riguroso de la atención sanitaria en los 53 Estados miembros de la Región Europea revela cifras que exigen una reacción inmediata. Según los datos expuestos, casi tres de cada diez mujeres han sufrido violencia física o sexual a lo largo de su vida. Sin embargo, los sistemas de salud no siempre garantizan los servicios esenciales recomendados por la OMS, como la atención médica de urgencia, la anticoncepción de emergencia, la profilaxis postexposición al VIH o la atención psicológica especializada.
Durante su intervención, la ministra García insistió en que esta situación requiere una acción sanitaria sólida y continuada: “La violencia machista es una de las mayores emergencias sanitarias de nuestro tiempo, y España está decidida a responder con un sistema que proteja, acompañe y repare”.
El informe identifica también buenas prácticas, entre las cuales España destaca por la consolidación de protocolos específicos en atención primaria, la formación obligatoria del personal sanitario y la creación de espacios seguros para el primer contacto de las víctimas con profesionales de referencia.
Asimismo, se subraya el trabajo interinstitucional entre sanidad, servicios sociales, fuerzas de seguridad y justicia, considerado clave para generar respuestas coordinadas.
Persisten desafíos importantes, especialmente en garantizar una atención homogénea en todas las comunidades autónomas y en reforzar servicios adaptados a mujeres en situaciones de vulnerabilidad. Estas brechas recuerdan la importancia de seguir fortaleciendo políticas que aseguren una atención accesible y adecuada para todas.
La OMS insta a los Estados miembros a integrar completamente el paquete de servicios esenciales, eliminar normativas que vulneren la autonomía y la confidencialidad de las víctimas y asignar recursos suficientes y sostenibles para garantizar una atención de calidad en todo el territorio.
La presentación del informe en Madrid subraya la importancia del trabajo conjunto entre la OMS y el Ministerio de Sanidad para avanzar hacia modelos de atención más humanos, accesibles y sensibles a la realidad de las supervivientes. El Gobierno de España ha reiterado su compromiso de fortalecer un sistema sanitario que actúe como primer espacio de apoyo, acompañamiento y protección. Más que una comparación entre países, el mensaje es un llamamiento a la cooperación internacional y al refuerzo continuo de los sistemas de salud, situando la dignidad, la autonomía y la seguridad de mujeres y niñas en el centro de la acción pública.
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