El president Illa defiende en México que Cataluña ejerza “a fondo” su papel de puente entre Europa y Latinoamérica e impulsa la idea de una cumbre periódica de regiones para afrontar retos globales desde la cooperación territorial.
HoyLunes – Bajo la cúpula solemne del Senado mexicano, entre delegaciones internacionales y el eco de una agenda global compartida, el president Salvador Illa trazó una visión que aspira a superar fronteras y viejas inercias: convertir a Cataluña en un puente práctico, cultural y económico entre Europa y Latinoamérica. No como una imagen poética, sino como un propósito diplomático con estructura, memoria y ambición.
A miles de kilómetros de Barcelona, pero con la mirada puesta en ambos lados del Atlántico, Illa presentó una propuesta que mezcla historia, geopolítica e infraestructura: un puente catalán con cimientos reales.
En su conferencia en el Senado mexicano, en el marco del ‘Foro sobre el papel de los gobiernos regionales en el desarrollo productivo’, Salvador Illa afirmó:
“Cataluña quiere ejercer a fondo su condición de puente entre Europa y Latinoamérica”, desde “una mirada internacionalista, abierta y respetuosa”. Y añadió: “Si a Cataluña le va bien, a España, a Europa, a América y al mundo les irá bien. Y a la inversa”.
También defendió un “federalismo europeo abierto, solidario, que mire a México y Latinoamérica en igualdad y con respeto”, proponiendo además celebrar una Cumbre de Regiones Europeas y Americanas para fortalecer la cooperación territorial.
Finalmente, apeló a la fraternidad entre Cataluña y México, recordando que hoy viven más de 21.000 catalanes en México y casi 9.000 mexicanos en Cataluña, y animó a consolidar esta relación humana, cultural y económica.
La intervención de Illa no se limita a un gesto diplomático ocasional; forma parte de una estrategia más amplia de internacionalización catalana que busca equilibrar lo cultural, lo económico y lo geopolítico.
Cataluña quiere ocupar un rol activo en un mundo donde las regiones adquieren peso en la economía global.
Esta estrategia no nace de cero. En los últimos años Cataluña ha avanzado hacia un modelo de internacionalización con varias piezas claves:
Plan “Cataluña Lidera” (2025–2030): 18.500 millones en infraestructuras, energía y logística.
Proyección europea: Illa ya defendió en Bruselas un modelo de Cataluña conectada a Europa y abierta al mundo.
Participación cultural internacional: presencia destacada en la FIL de Guadalajara.
El discurso de Salvador Illa en México proyecta una ambición territorial que aspira a unir continentes y realidades diversas. Cataluña quiere abrir ventanas al exterior, y lo hace apelando a la cooperación, la cultura compartida y la visión europea de futuro abierto.
Pero, como todo puente, requiere cimientos sólidos: coordinación institucional, transparencia, inversión sostenida y participación ciudadana.
El reto no es menor, conectar mundos sin fracturar los propios equilibrios internos.
Si este proyecto prospera, Cataluña podría convertirse en una referencia internacional para las regiones que buscan un papel más activo en la gobernanza global.
La pregunta —la decisiva— es si el puente será construido con consenso, visión y responsabilidad.
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