Los humanos son sensibles a una amplia gama de olores y sustancias químicas emitidas por otros, proporcionando señales sociales a menudo de manera inconsciente.
Hoylunes – Un estudio reciente ha revelado un fascinante vínculo entre las lágrimas humanas y la reducción de la agresión masculina, sugiriendo que las lágrimas emocionales podrían tener un propósito evolutivo más profundo. Este estudio, que podría ser aplicable a todos los seres humanos, indica que las lágrimas generan una reacción empática que va más allá de lo que se conocía anteriormente.
Los investigadores descubrieron que los hombres, tras inhalar las lágrimas de las mujeres, mostraban una disminución en la agresión de más del 40%, evaluada tanto en su comportamiento como en la actividad cerebral. Estos resultados, publicados en la revista PLOS Biology, podrían extenderse a todas las lágrimas humanas.
Noam Sobel, neurobiólogo del Instituto Weizmann de Ciencias en Israel y coautor del estudio, explica que las lágrimas podrían ser una señal química que actúa como un mecanismo de protección contra la agresión, un fenómeno presente tanto en humanos como en roedores, y posiblemente en otros mamíferos.
Investigaciones previas ya habían mostrado que las lágrimas femeninas reducen los niveles de testosterona en los hombres, así como los indicadores fisiológicos de excitación y la excitación sexual autoinformada. «Iniciar esta investigación con hombres fue una decisión estratégica, ya que la disminución de la testosterona tiene un mayor impacto en la agresión masculina», comenta Shani Agron, neurobiólogo del Instituto Weizmann y autor principal del estudio.
Los humanos son sensibles a una amplia gama de olores y sustancias químicas emitidas por otros, proporcionando señales sociales a menudo de manera inconsciente. Investigaciones anteriores indican que las personas pueden detectar el miedo y la ansiedad de los demás a través del olor, y que el sudor también puede transmitir información emocional. Incluso en las interacciones entre especies, como con los perros, se han observado respuestas a señales químicas humanas.
Para este estudio, se recolectaron lágrimas «emocionales» de seis donantes femeninas. Estas lágrimas se utilizaron en un experimento donde veinticinco hombres jugaron un videojuego diseñado para inducir agresión. Se midió la agresión de los participantes a través de sus decisiones en el juego y, en una segunda parte del experimento, se utilizó un escáner de resonancia magnética para observar la actividad cerebral de otros 26 hombres mientras jugaban.
Los resultados fueron claros: los hombres mostraron una reducción del 43,7% en la agresión después de oler las lágrimas en comparación con una solución salina de control. Además, se observaron cambios significativos en áreas cerebrales relacionadas con la agresión y la toma de decisiones.
Estos hallazgos apoyan la idea de que las lágrimas tienen un poderoso efecto de señalización quimiosocial, similar a lo observado en animales no humanos. Por ejemplo, las ratas topo macho subordinadas utilizan lágrimas para evitar ataques de machos dominantes, y en los ratones, las lágrimas contienen una sustancia química que reduce la agresión entre los machos.
En futuras investigaciones, el equipo busca explorar si las mujeres experimentan reducciones similares en la agresión después de oler lágrimas y si las lágrimas de los bebés provocan respuestas parecidas en los adultos.
Fuente: https://www.smithsonianmag.com/smart-news/sniffing-womens-tears-may-reduce-aggression-in-men-study-finds-180983509/?utm_source=smithsonian-weekender&utm_medium=email&utm_campaign=editorial&spMailingID=49251279&spUserID=NzU3NjY0ODAxMDcS1&spJobID=2603068953&spReportId=MjYwMzA2ODk1MwS2
