Lara se quedó sin nada más que un corazón lleno de dolor. Había llegado el momento de decir adiós, de dejar atrás la soledad y las penas que Mario le había dejado.
Por Ehab Soltan… La segunda parte de la novela {LimoneroII}
Hoylunes – En las sombras de un amor que una vez fue prometedor, vivía Lara, una mujer cuya vida había sido marcada por la traición y el desengaño. Su historia con Mario, un hombre en quien había confiado su corazón, se había convertido en un camino de soledad y dolor.
Lara había creído en Mario, viendo en él un renacimiento, una nueva oportunidad para el amor. Pero con el tiempo, descubrió que vivir con él era una ilusión, una fantasía construida sobre la frágil arena de la traición.
Cada día que pasaba, Lara se daba cuenta de que el amor que sentía por Mario era una gran pérdida. Había entregado su corazón, creyendo en sus promesas, solo para darse cuenta de que él era de esas personas que no conocen el valor de quienes los aman.
La paciencia de Lara llegó a su fin. Se encontró viviendo sus días como si estuviera sola, su amor por Mario convertido en un recuerdo helado y endurecido. «Quédate solo… camina… y cánsate de la vida», se decía a sí misma, liberándose de los lazos que una vez la habían atado a él.
A pesar de haberle dado todo su amor, Lara se quedó sin nada más que un corazón lleno de dolor. Había llegado el momento de decir adiós, de dejar atrás la soledad y las penas que Mario le había dejado.
«Aléjate… vive en tu soledad… vive con tus penas», le diría a Mario si pudiera. Lara sabía que después de él, estaría bien. La seguridad de esta verdad le daba fuerza para seguir adelante.
Mario, un artista en el lienzo de sus heridas, ya no tenía lugar en su corazón. En el adiós silencioso de Lara, sólo quedaba el dolor y la promesa de un nuevo comienzo, un futuro donde ella podría sanar y finalmente ser libre #ehabsoltan, #limoneroII, #hoylunes,
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